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Qué es una Radiofrecuencia de Cornetes

La radiofrecuencia de cornetes es un tratamiento médico mínimamente invasivo utilizado para reducir el tamaño de los cornetes nasales que al agrandarse causan obstrucción nasal. Este procedimiento emplea energía de radiofrecuencia para generar calor controlado, que reduce el tejido excesivo de los cornetes, mejorando así el flujo de aire y aliviando los síntomas de congestión nasal crónica.

¿Qué son los Cornetes Nasales?

Los cornetes nasales son estructuras óseas recubiertas de tejido esponjoso que se encuentran a lo largo de las paredes laterales de la cavidad nasal.

Tienen la función de humidificar, calentar y filtrar el aire que inhalamos antes de que llegue a los pulmones con alternancia de ambas fosas nasales, de manera que tiene una función dinámica que hace que un lado de la nariz se dilate y el otro lado se constriña y al cabo de unas horas bascula al revés.

Los cornetes se dividen en tres partes: cornetes superiores, medios e inferiores.

Los cornetes inferiores son los más importantes en la función respiratoria, más grandes y los que suelen aumentar de tamaño, o hipertrofiarse, causando una obstrucción nasal.

¿Por qué se Agrandan los Cornetes?

Los cornetes se agrandan por su función dinámica de alternancia, reglada por un sistema muy sofisticado, que por diferentes razones se puede descompensar, como:

• Rinitis alérgica: una reacción alérgica prolongada puede provocar la inflamación de los cornetes.
• Rinitis vasomotora: es un tipo de inflamación nasal crónica que no está relacionada con alergias.
• Irritantes ambientales: la exposición prolongada a contaminantes, humo, polvo o productos químicos.
• Infecciones respiratorias: resfriados, sinusitis u otras infecciones que pueden causar inflamación temporal o crónica.
• Cambios hormonales: factores como el embarazo o el uso de ciertos medicamentos también pueden contribuir a la hipertrofia de los cornetes.

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Cómo se realiza la Radiofrecuencia de Cornetes

El procedimiento de radiofrecuencia de cornetes utiliza una sonda fina que emite energía de radiofrecuencia. Esta energía crea ondas en forma de disparos que generan calor controlado que se aplica al tejido de los cornetes, causando una coagulación suave de las proteínas en el tejido excesivo. Este proceso reduce gradualmente el volumen del tejido de los cornetes, permitiendo un flujo de aire más libre a través de la nariz.

A diferencia de otros procedimientos quirúrgicos, la radiofrecuencia no implica la extracción de tejido o hueso, sino que reduce el volumen del tejido de manera interna.

Procedimiento

Una sesión de radiofrecuencia de cornetes suele durar entre 15 y 30 minutos y consiste en:

• Anestesia Local: se administra anestesia local para adormecer el área dentro de la nariz, minimizando el dolor o las molestias durante el procedimiento.
• Inserción de la Sonda: una pequeña sonda de radiofrecuencia se introduce cuidadosamente en los cornetes inferiores.
• Aplicación de Energía de Radiofrecuencia: la sonda emite ondas de radiofrecuencia que generan calor controlado. Este calor descompone el tejido submucoso (tejido debajo de la mucosa), reduciendo el volumen del tejido hipertrofiado sin dañar la superficie mucosa.
• Finalización del Procedimiento: una vez que se ha aplicado la energía suficiente, la sonda se retira, y se deja al paciente en observación por un corto período antes de ser dado de alta.

Después de una radiofrecuencia de cornetes es importante seguir las indicaciones del otorrinolaringólogo para asegurar una recuperación óptima, que pueden incluir evitar tocarse la nariz, sonarse con fuerza y hacer ejercicio intenso; utilizar suero fisiológico, dormir con la cabeza elevada y evitar irritantes. Por el resto se puede hacer vida normal.

Resultados

Los resultados de la radiofrecuencia de cornetes suelen ser duraderos (varios años según la causa de su hipertrofia y respuesta del paciente) y proporcionan una mejora notable en la calidad de vida al facilitar la respiración y reducir los síntomas relacionados con la congestión nasal crónica.

Recuperación

La recuperación después de una radiofrecuencia de cornetes es generalmente rápida y con mínimas molestias permitiendo a los pacientes retomar su vida normal rápidamente.

La recuperación de la radiofrecuencia de cornetes generalmente incluye:

• Inmediatamente después: puede experimentar una leve congestión nasal, hinchazón o molestias por lo que suele requerirse permanecer en observación durante 15-30 minutos. La mejora funcional es importante y horas después los cornetes se inflaman.
• Primeros días: es común tener sensación de congestión o presión (similar a un resfriado leve), desarrollar pequeñas costras nasales (debido a la cicatrización del tejido tratado) o tener alguna molestia leve controlable con analgésicos en caso necesario.
• Segunda semana: la sensación de congestión y cualquier molestia residual generalmente disminuyen significativamente. La mayoría de los pacientes notan una mejora progresiva en su respiración nasal durante este tiempo
• Tercera o cuarta semana: se completa la cicatrización interna con una respiración nasal más libre y menos congestión. Es recomendable hacer un seguimiento para evaluar el éxito del tratamiento y asegurar que la recuperación esté progresando adecuadamente.

Riesgos

La radiofrecuencia de cornetes es un procedimiento seguro con bajo riesgo de complicaciones siendo las principales:

• Sangrado ligero: durante o después del procedimiento. Se controla fácilmente con la aplicación de presión o taponamiento nasal.
• Infección: es sumamente infrecuente pero existe un riesgo de infección de la zona tratada que en algunos casos puede llevar al uso de antibióticos profilácticos.
• Cicatrización excesiva o formación de tejido de granulación: en casos raros puede aparecer requiriendo un tratamiento adicional.

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Beneficios de la Radiofrecuencia de Cornetes

La radiofrecuencia de cornetes ofrece numerosos beneficios relacionados con la respiración:

• Alivio de la mucosidad: se reduce su producción excesiva de mucosidad y mejora su drenaje.
• Mejora significativa de la respiración nasal: reducción de la obstrucción nasal permitiendo un flujo de aire más libre y fácil a través de las fosas nasales.
• Alivio de la congestión nasal crónica: alivio duradero de la sensación de congestión asociada a condiciones como la rinitis alérgica o vasomotora.
• Reducción de la dependencia de medicamentos: menor necesidad de descongestionantes o esteroides nasales para controlar los síntomas nasales.
• Mejor calidad del sueño: disminución de problemas relacionados con la respiración, como ronquidos o apnea del sueño, mejorando el descanso nocturno.

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